Montaña rusa de sensaciones para Conway, López y Kobayashi tras ganar Las 24 Horas de Le Mans con el Toyota 7. Lo anunciaron, ejecutaron y ganaron.
Cuarta victoria consecutiva para Toyota Gazoo Racing en las 24h de Le Mans, pero esta vez era el #7 quien se subía a lo más alto del cajón y conseguía su primera victoria en La Sarthe. El Toyota 8, después de conseguir las tres victorias anteriores, conformó el doblete de la marca nipona y el #36 de Apine cerró el podio. La trilogía conformado por Conway, López y Kobayashi ganaba la primera cita en Le Mans de la era ‘Hypercar’. Después de tres años de frustración por las victorias de sus compañeros (en 2017 estuvieron muy cerca), lograron una victoria tremendamente emotiva.
“Estuvimos cerca muchas veces, y hacerlo aquí con el nuevo ‘Hypercar’ con estos muchachos… los compañeros de equipo hicieron un trabajo estelar como siempre”, afirmó un Mike Conway muy emocionado en ‘Eurosport’. Prosigue el piloto británico: “Círculo completo, muchas emociones. Es un poco de todo, trabajas tan duro cada año que te olvidas de lo difícil que es”.
De las lágrimas de Conway pasamos a un Pechito López verdaderamente estresado. Y es que el piloto argentino pasó duros momentos de sufrimiento, cuando su Toyota GR010 Hybrid empezó a tener problemas con el combustible, similares al del Toyota 8. “Venimos de muy lejos de aquí. Tiempos difíciles, hace mucho que no veo a mi padre, mucho trabajo. Y cuando sufres como sufrimos nosotros en los años anteriores, creo que es especial. El primero es siempre muy especial. Al final, cuando tuvimos este problema de combustible, tuvimos que hacer muchas cosas en el auto. Fue muy estresante”, comentó el piloto cordobés.
